Entrena tu mente
En un deporte como el triatlón, sabemos que es vital entrenar cada una de las especialidades con un programa claro y preciso para ir desarrollando o mejorando nuestras capacidades, las cuáles hacen que nuestro desempeño sea mejor en cada entrenamiento y, por supuesto, en competencia.
Analicemos un poco: cuéntanos, ¿La preparación fÃsica para nadar impacta en tu velocidad en el agua?, ¿la estrategia que aplicas en la bici impacta en tu resultado?, ¿consideras qué mejorar tu técnica de carrera impacta en bajar tus tiempos?, y por último, ¿crees qué la preparación de las transiciones son importantes?
Seguramente respondiste a todo que sÃ, ya que la inversión de tiempo en cada una de las pruebas es necesario para que puedas mejorar y ver resultados en lo que haces en cada entrenamiento. Pero ¿Alguna vez has entrenado tu mente?, ¿alguna vez has detectado qué piensas y qué sientes al estar entrenando? Probablemente, el tiempo que le dedicas a entrenar tu cuerpo es mayor en comparación con el tiempo que le dedicas a entrenar tu mente.
Se puede pensar que todo el trabajo multidisciplinario que conlleva la mejora del rendimiento es exclusivo para los deportistas élite, sin embargo, no tienes que ser un deportista de alto rendimiento para seguir un plan de entrenamiento, tener guÃa nutricional, acudir a masajes de descarga muscular y prestar atención a todo aquello que te hace sentir bien durante los entrenamientos. Aprender a identificar todo lo que te ayuda a potencializar el rendimiento, será el primer paso para poder dedicarle tiempo.
Manos a la obra…
Desde el entrenamiento mental, arranquemos con que descubras qué es lo que estás sintiendo antes, durante y después de entrenar. Detén un momento tu mente y enfócate en sentir cada pisada, en cómo es tu respiración, analiza cómo te sientes y cómo te vas sintiendo conforme avanza el entrenamiento y descubre qué te va haciendo sentir mejor o qué te hace dar ese extra. ¿Has notado que tus mejores entrenamientos suelen ser los de mayor disfrute?
Compruébalo.
Otro factor significativo es detectar cómo son tus pensamientos ante alguna dificultad. Averigua qué pensamientos surgen cuando estás muy cansado, cuando estás a medio entrenamiento, cuando ves que corres el km más rápido… La idea es conocer si encuentras fácilmente una solución, si te sobrepones rápidamente o si tus pensamientos tienden a ser catastróficos.
Recuerda que antes de poder modificar algo, tenemos que conocerlo, por ello, es importante desarrollar la autoobservación, la cual te ayudará a encontrar qué te hace bien.
Entrenar nuestra mente y nuestro cuerpo incrementa nuestra calidad de vida y mejora nuestra salud en diferentes formas, por ello, acércate a los expertos de cada área multidisciplinar. Un psicólogo del deporte te puede brindar herramientas especÃficas para aumentar, las posibilidades de cumplir con tus objetivos.
Parma Aragón
Dahiana Salazar González
Abril Cantú Berrueto